Mateo Bonifacino y Andrés Lanfranco realizaron la defensa de su proyecto final correspondiente a la carrera ingeniería electromecánica de la UTN Paraná, el mes pasado. “Diseño y cálculo de máquina para corte de bobinas de papel”, es el título del trabajo en el cual plantearon una solución a un problema en una industria local, que también se presenta en otras empresas del mismo rubro. Los flamantes ingenieros estuvieron en comunicación con FM Universidad en La hora tecnológica y comentaron sobre el proceso del proyecto.
La defensa del trabajo final fue de manera virtual y contaron que la idea de trabajar en la Papelera de Entre Ríos fue a partir que Bonifacino realizara sus prácticas profesionales allí y hallara la problemática que se basa principalmente en la dificultad y el riesgo que supone cortar las bobinas. Luego de detectar esta problemática y de conversar con docentes la posibilidad de analizar y diseñar un prototipo automatizado para el cortado de bobinas, a fines de 2019, surge una oportunidad laboral que se interponen en los tiempos, y «hablando con Andrés, que también estaba buscando que proyecto realizar le planteo mi situación» y le interesó sumarse a la propuesta en la papelera, recordó Bonifacino.
La realización del proyecto al principio fue difícil porque juntarse a trabajar de manera presencial era una verdadera dificultad por la pandemia que lo impedía de distintos modos, entre ellas, no poder utilizar los laboratorios de la facultad.
El proyecto final pretende facilitar el corte de bobinas de papel de gran porte, explicó Lanfranco que «a veces estas bobinas pueden llegar a medir hasta 2 m de diámetro y 2 m de largo, es decir, son bobinas muy grandes, y pesan aproximadamente 2 toneladas». A este trabajo los operarios actualmente lo hacen con cierras circulares eléctricas con el riesgo que conlleva, por ejemplo, en las bobinas muy grandes «los operarios se suben tipo a caballito de la bobina» y lo cortan con la cierra circular eléctrica. El diseño que los ingenieros plantearon es por medio de una maquina semiautomática que con una mínima capacitación a los operarios, podrían utilizarla.
El trabajo de final de carrera también tuvo en cuenta el estudio de mercado. En la región no encontraron fabricas, por lo que realizaron un trabajo comparativo con Europa, con una maquinaria similar. Las fabricadas en el viejo continente cuestan alrededor de 34 mil de euros, sin tener en cuenta los traslados, los impuestos, la aduana, mientras que la maquina que ellos diseñaron costaría 37 mil euros. Además señaló Lanfranco que «nuestra maquina ofrece mayor capacidad en cuanto a las medidas a cortar», por ejemplo, las maquinas europeas cortan hasta 1,5 m de diámetro, mientras la diseñada por ellos hasta 2 m de diámetro.
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